1
10
315
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/d96266764cb977b7dc3019694de0027e.pdf
d21ef6db6b547ed9a1cdcbb2602c68a0
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fragmentos de la URSS: el Cáucaso y Asia Central
Artículo de prensa
Textos publicados en periódicos y revistas.
Texto original
<p>La noticia muy controvertida es sencilla de relatar y puede hasta asombrar, aunque se hace cada vez más difícil que sorprenda en este presente que un gobierno <strong>viole instituciones, el sentido de la justicia y hasta el honor.</strong></p>
<p>La cuestión es así: en 2004 un oficial del ejército de Azerbaiján, Ramil Safarov, tomó un hacha y en plena noche la descargó sobre el cuello de un teniente armenio, Gurgen Markarian, hasta casi desprenderle la cabeza.</p>
<p><strong>Fue el acto de un psicópata que intento justificar con el argumento de que la víctima lo había insultado</strong> . En el trasfondo está la guerra que estos países sostuvieron en la década del ‘90 por el enclave armenio de Nagorno Karavagh, conflicto que desde 1994 esta apenas detenido por un frágil cese de hostilidades.</p>
<p>El tremendo crimen del relato sucedió en Budapest, la capital de Hungría, cuando los dos oficiales realizaban un curso de inglés patrocinado por la Otan para los países de la ex URSS. Debido a lo inapelable del caso, la justicia de ese país condenó rápidamente a Safarov a cadena perpetua. Pero el 31 de agosto pasado, el gobierno húngaro <strong>accedió al pedido de extradición formulado por Azerbaiján</strong> con el compromiso de que el asesino continúe su condena allí. No fue así. En cuanto el prisionero llegó a Bakú el presidente azerí Ilham Alyev lo liberó en un acto en el cual lo declaró héroe nacional y su ministerio de Defensa lo ascendió a mayor, le regaló un departamento y le pagó todos los sueldos caídos durante los ocho años que permaneció en la prisión húngara. Debe haber <strong>pocos mensajes tan concluyentes de impunidad y estímulo para quien cometa un crimen de odio.</strong></p>
<p>El escándalo y perturbación que produjo este episodio fue tal que disparó una cadena de repudio alrededor del mundo; desde la Casa Blanca hasta Moscú y toda Europa. Hungría buscó distanciarse sosteniendo que había accedido a la extradición por el compromiso de la contraparte azerí de que Safarov seguiría encarcelado. Pero todo quedó en <strong>una telaraña muy confusa</strong> , especialmente después que trascendió que poco antes de estos sucesos, el polémico régimen ultranacionalista de Víctor Orban en Hungría había iniciado negociaciones con Azerbaiján para obtener un préstamo de entre 2 y 3 mil millones de euros de esa rica nación petrolera.</p>
<p>Algunos analistas citados por <strong>The New York Times</strong> desde Moscú consideraron que Alyev, heredero de la dinastía gubernamental que inició su padre y que proclama constantemente su odio hacia los armenios, <strong>tomó esta decisión para mejorar su imagen</strong> con vistas a las elecciones del año que viene. De ser así, parece una movida exagerada y quizá innecesaria teniendo en cuenta el control total que ejerce sobre la política del país.</p>
<p>Lo cierto es que este hecho provocó una escalada de la tensión binacional y el temor de que se desencadene una guerra de derivaciones imprevisibles en el Cáucaso Sur. El presidente armenio Serzh Sarkisian ordenó hace pocos días <strong>el alerta máximo de sus fuerzas armadas</strong> y advirtió a Bakú que esta dispuesto a ir a la guerra.</p>
<p>Alyev puede haber actuado irresponsablemente, pero aún con esa cuota de inconsciencia resulta difícil desprender este episodio y su carácter provocador, del actual marco global. Una conflagración en el Cáucaso puede producir en las actuales circunstancias mundiales, y por las alianzas internacionales de cada uno de esos bandos, <strong>un cataclismo con consecuencias mucho más allá de esos países</strong> casi en el haz del atentado en Sarajevo a comienzos del siglo pasado.</p>
<p>Conviene observar en detalle lo estrecho de la cornisa por la que actualmente esta rodando el planeta y el nivel de riesgo de estos juegos. La actual crisis global, principal fuente de inestabilidad social y política mundial, tiene una perspectiva mucho más grave que lo que se preveía hace apenas unos meses. El indicador de actividad industrial en China esta hoy en su peor nivel desde marzo de 2009. A su vez el registro de confianza de los gerentes (responsables de la compras de insumos) de Alemania registra, según Eurostat, una caída sin precedentes en tres años. Como acaba de señalar <strong>The Wall Street Journal</strong> , si Alemania se traba, la eurozona perderá su única locomotora y ello tendrá un efecto más allá del continente golpeando a EE.UU.</p>
<p>También en Asia, Japón, que mostró cierta recuperación, volvió a perder pie y se descuenta que se encogerá otra vez en lo que queda del año. En el norte de África y todo el Oriente Medio este panorama se mide por el encarecimiento de los alimentos y el aumento de la pobreza, que fomentan <strong>el crecimiento de las tendencias integristas ultrarreligiosas</strong> . Es un tablero de ajedrez con las pocas piezas llegando al jaque mate. Sucede no casualmente en un mundo donde <strong>China le acaba de imponer un sonoro límite a EE.UU.</strong></p>
<p>para que no intervenga en el mar de la China, que Washington considera parte de su espacio estratégico, y Beijing su “mare nostrum”. O en el que Rusia, anfitrión desde este sábado en la emblemática Vladivostok de la influyente cumbre económica del Asia Pacífico (Apec), <strong>se ha apropiado literalmente de la crisis en Siria, y del futuro de ese país y del vecindario</strong> . Todo ello a despecho de las presiones de Europa, EE.UU. o de potencias regionales como Turquía, vale recordar el principal aliado de Azerbaiyán y que también acaba de enarbolar imprevistamente en medio de las actuales contingencias la “cuestión” de Nagorno.</p>
<p>La irrupción de un mundo multipolar, aun con sus desordenes, podría ser una buena noticia pero no es una consecuencia buscada, <strong>sino el efecto del aplanamiento de los liderazgos</strong> que tanto explica como motiva la ausencia de una salida a la crisis. Esto ya sucedió en el pasado <strong>y la válvula para “ordenar” la anarquía fue un torrente de sangre</strong> que convirtió al siglo veinte en uno de los más violentos de la historia moderna. Episodios como los de Azerbaiján son luces rojas en un camino de oscuridad. Pueden estar indicando mucho más de lo que parece.</p>
<p>Copyright Clarín, 2012.</p>
Enlace
<a href="https://www.clarin.com/opinion/Caucaso-juegos-guerra-vez-peligrosos_0_Sk7wE1l2wXe.html" target="_blank">https://www.clarin.com/opinion/Caucaso-juegos-guerra-vez-peligrosos_0_Sk7wE1l2wXe.html</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Cáucaso: juegos de guerra, cada vez más peligrosos
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Marcelo Cantelmi
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
08/09/2012
Source
A related resource from which the described resource is derived
Clarín
Description
An account of the resource
Opinión sobre el asesinato de un teniente armenio a manos de un homólogo azerí que reavivó las brasas del conflicto armenio-azerí.
Armenia
Asesinato
Azerbaiyán
Cáucaso
Conflicto
Crímenes de odio
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/701749f3fae5eba7a7831c8900d033a1.pdf
a51b1cf0cd3bb088afc6938c1440c387
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Generales sobre la URSS y el mundo comunista de finales del siglo XX.
Artículo de prensa
Textos publicados en periódicos y revistas.
Texto original
<p>Armenia se blindó ayer frente a su vecino y enemigo Azerbaiyán al firmar con Rusia un Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Mutua que prevé que una de las partes ayude militarmente a la otra si se produce una "agresión exterior". La pequeña república caucásica, de apenas tres millones y medio de habitantes, se reafirma así como lo más parecido a un país satélite que existe en el espacio de la desaparecida Unión Soviética.El presidente armenio, Levon Ter-Petrosian, negó que el compromiso suscrito con Borís Yeltsin tenga ese objetivo, pero es difícil no hacer tal lectura cuando la <em>paz caliente</em> en el Alto Karabaj (en territorio azerbaiyano), que se mantiene con dificultades desde 1994, puede saltar por los aires apenas Bakú se vea con fuerzas para recuperar el enclave.</p>
<div id="elpais_gpt-INTEXT" data-google-query-id="CJWhmpScmtUCFUmHUQodMGEFcw">
<div id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0__container__"><iframe id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0" title="3rd party ad content" name="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0" frameborder="0" marginwidth="0" marginheight="0" scrolling="no" width="1" height="1" data-integralas-id-a2055ac7-ade2-ca7c-b6f8-68e750ec095c=""></iframe></div>
</div>
<p>El líder armenio pidió ayer que el conflicto se resuelva "por el camino más corto", es decir, el diálogo directo entre las autoridades de Azerbaiyán y las del Alto Karabaj. Lo lógico, dijo, es que se aplique "un formato similar al utilizado en Chechenia, Abjazia (en Georgia) y el Trandsniéster (en Moldavia)". Sin embargo, Bakú insiste en que sólo quiere tratar con Yereván. Aquella guerra, que se cobró unas 35.000 vidas, sigue siendo una herida abierta entre los dos países caucásicos y no es ajena a las tensas relaciones entre Bakú y Moscú a causa de la ayuda militar que le llegó a Armenia desde Rusia.</p>
<p>La sintonía política es tan notable que incluso se ha venido hablando de la posibilidad de que Armenia se uniese a la unión ruso-bielorrusa o firmase un compromiso similar con Moscú. Según los comunistas armenios, se han recogido ya 800.000 firmas para pedir un referéndum sobre la cuestión, pero no parece que la iniciativa vaya a fructificar. Hoy se creará una empresa mixta, Amrosgas, que permitirá el paso del gas ruso, vía Armenia, a nuevos mercados.</p>
<p class="nota_pie">* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 30 de agosto de 1997</p>
Enlace
<a href="https://elpais.com/diario/1997/08/30/internacional/872892015_850215.html" target="_blank">https://elpais.com/diario/1997/08/30/internacional/872892015_850215.html</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Rusia consolida a Armenia como su país satélite en el Cáucaso mediante un amplio tratado de cooperación
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Luís Matías Pérez
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
30/08/1997
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País
Description
An account of the resource
Rusia y Armenia firman un tratado de auxilio mutuo ante agresiones externas.
Armenia
Azerbaiyán
Relaciones internacionales
Rusia
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/bf45935288c7a5443dc4ed2d80d299f0.pdf
a5b6fc919db2a1728fcff01cf66249f0
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Generales sobre la URSS y el mundo comunista de finales del siglo XX.
Artículo de prensa
Textos publicados en periódicos y revistas.
Texto original
<p>Dos testigos, dos versiones: el presidente de Rusia, Borís Yeltsin, y su homólogo de Ucrania, Leonid Kravchuk, dos de los tres dirigentes eslavos que sellaron el fin de la Unión Soviética el 8 de diciembre de 1991 en Bielorrusia, recuerdan de forma diferente y a veces contradictoria los históricos sucesos que protagonizaron en un pabellón de caza de la élite soviética en el bosque de bisontes de Bielovezhskaia.Así lo revelan, por una parte, las memorias de Yeltsin <em>-Notas de un presidente-</em> y<em>,</em> por otra, varias pormenorizadas entrevistas con Leonid Kravchuk que está publicando el periódico <em>Kievski Vedomosti,</em> de Kiev. Las memorias de Yeltsin acaban de aparecer en Rusia en una lujosa versión que algún comentarista local ha comparado a <em>La pequeña tierra,</em> un relato autobiográfico de Leonid Breznev, en clave de autobombo, que fue lectura obligada en las escuelas.</p>
<div id="elpais_gpt-INTEXT" data-google-query-id="CKezyvmUmtUCFUqoUQodOucKoQ">
<div id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0__container__"><iframe id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0" title="3rd party ad content" name="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/diario/intext_0" frameborder="0" marginwidth="0" marginheight="0" scrolling="no" width="1" height="1" data-integralas-id-19ba4a2f-d11d-8021-8660-a6c6189dbe14=""></iframe></div>
</div>
<p>Yeltsin y Kravchuk son políticos en activo, y sus relatos encajan en las respectivas coyunturas de los autores. Yeltsin, a quien los sectores nacionalistas reprochan la desintegración de la URSS, explica la inevitabilidad del proceso que medió desde el intento de golpe de Estado de agosto de 1991 a la desintegración formal de la URSS cuatro meses después: "El centro personificado por Gorbachov estaba totalmente desmoralizado. Había perdido el crédito de confianza en los Estados nacionales que renacían. Había que hacer algo", señala. "Me parecía entonces que el acuerdo de Bielovezhskaia era necesario; en primer lugar, para reforzar la tendencia centrípeta en la Unión que se desintegraba, y para estimular el proceso de acuerdo". "La CEI era en aquel momento la única posibilidad de conservar un espacio geopolítico único", asegura Yeltsin, que dice haber acudido a la cumbre eslava con la convicción de que los recursos del entonces presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, estaban agotados.</p>
<p>Yeltsin, que describe con gran elocuencia su papel frente a los golpistas en agosto, liquida parcamente la cumbre de Bielorrusia. "Mirando los rostros exteriormente tranquilos, pero muy tensos, incluso excitados, de Kravchuk y [Stanislav] Shushkevich [el líder de Bielorusia], yo comprendía que íbamos en serio y que, tal vez, <em>dejábamos marchar</em> para siempre a Ucrania y a Bielorrusia, otorgándoles el mismo rango que a Rusia en el texto del tratado", señala Yeltsin.</p>
<p>Para Kravchuk, orgulloso de pasar a la historia como padre de la independencia de Ucrania, la cumbre de Bielovezhskaia fue la oportunidad única de lograr el reconocimiento de Ucrania como Estado autónomo, y al llegar a ella "ni siquiera pensaba" que acabaría con la aprobación de un documento concreto.</p>
<p>En la cumbre de Bielovezheskaia, los documentos que pusieron fin a la URSS fueron elaborados conjuntamente, relata Yeltsin. El presidente ruso no menciona el documento que Kravchuk asegura haber llevado (escrito a mano para evitar filtraciones) desde Kiev, ni las diferentes variantes que la delegación rusa tenía en reserva para afrontar las distintas situaciones que pudieran producirse.</p>
<p>En una conversación con esta corresponsal, Kravchuk confirmó que la diferencia básica entre su documento y la posición inicial de Yeltsin era la idea del Estado, ya que mientras Kravchuk pensaba ya en un Estado ucranio independiente, Yeltsin partía de la idea de un Estado único fiara todos, y, defendía la firma del Tratado de la Unión entre las repúblicas integrantes de la URSS en línea con la posición que Gorbachov le había encargado transmitir a Kravchuk. Sin embargo, Yeltsin tenía preparada una alternativa para el caso de que su homólogo ucranio no aceptara su primera posición.</p>
<p>"Yeltsin veía que el Estado soviético se cuarteaba y que conservarlo no era fácil, porque estaban en marcha grandes procesos, pero entendía que si Ucrania y Bielorrusia estaban de acuerdo en un Estado soviético, entonces éste seguiría existiendo, y si no, no". El, argumento definitivo para convencer al líder ruso fueron los resultados del referéndum celebrado en Ucrania el 1 de diciembre, en el que un 91% de los ciudadanos se pronunció a favor de la independencia. Según Kravchuk, la única diferencia entre el modelo de Gorbachov y el modelo de Yeltsin sobre el destino de la URSS consistía en que "sobre los dirigentes de las repúblicas soberanas no debía haber un jefe de la Unión". Si Yeltsin mantenía la posición de Gorbachov. señaló Kravchuk, a Ucrania "le hubiera sido cien veces más difícil conseguir su independencia".</p>
<p>En la cumbre de Bielorrusia, Rusia estuvo a favor de una "frontera común" de los países participantes y "no surgieron reivindicaciones territoriales en el interior de la comunidad" ni se trató, por tanto, el tema de Crimea. Cuando el documento estuvo listo, había que informar a Gorbachov de la decisión adoptada, "pero nadie ardía en deseos de hablar con él". "Yeltsin tuvo la idea de informar a Bush [el presidente norteamericano] de nuestro encuentro. Por si acaso. Sin dirigirse a nadie en concreto, Yeltsin dijo: 'Yo, con Gorbachov hoy no hablo".</p>
<p>Kravchuk consiguió convencer a Shushkevich de que, como anfitrión de la cumbre, le correspondía a él hablar con Gorbachov, y el dirigente bielorruso llamó por teléfono al presidente de la URSS. Tras la conversación, "comprendimos que la cosa podía adquirir un rumbo no deseado", señala Kravchuk aludiendo a la posibilidad de que Gorbachov usara la fuerza. Entonces, Yeltsin pidió que le conectaran con el ministro de Defensa de la URSS, Evguéni Sháposhnikov, con quien tenía buenas relaciones, y consiguió su apoyo. A pesar de ello, "aún sentíamos que la legitimidad del documento adoptado no era suficiente", afirma Kravchuk. Fue entonces cuando decidieron llamar al dirigente de Kazajstán, Nursultán Nazarbáiev, que en aquel momento volaba de Almá Atá a Moscú para reunirse con Gorbachov.</p>
<p>Kravchuk asegura que simplemente se habían olvidado de él al planear la cumbre, y Yeltsin afirma que pensaron en desviar el avión que transportaba a Nazarbáiev y que el control aéreo del aeropuerto de autoridades de Vnukovo les prohibió comunicarse con él. Según Yeltsin, Nazarbáiev quiso ir a Minsk, pero fue seducido por Gorbachov en Moscú. Pero, según Kravchuk, se enfadó por no haber sido avisado previamente.</p>
<p>Los presidentes de las repúblicas ex soviéticas trataron sobre las condiciones de la jubilación de Gorbachov como jefe de Estado el 21 de diciembre en Almá Atá. Según Yeltsin, "muchos" de aquellos líderes querían privar al ex presidente de todo, dejarle la pensión de un jubilado corriente. "Yo prefería crear un precedente de jubilación digna de un jefe del Estado sin atmósfera de escán,dalo", asegura. Yeltsin se defiende de los reproches de falta de delicadeza con Gorbachov cuando le sustituyó en el Kremlin. alegando haberle dado una semana para recoger sus cosas. Kravchuk acepta mejor que Yeltsin la crudeza de las relaciones en Rusia. "No tenemos una alta cultura política, nuestra etiqueta está lejos de las normas internacionales generalmente aceptadas. Todo es lógico, no hay que asombrarse". "No estaba la cosa para despedidas", sentencia.</p>
<p class="nota_pie">* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de mayo de 1994</p>
Enlace
<a href="https://elpais.com/diario/1994/05/11/internacional/768607206_850215.html" target="_blank">https://elpais.com/diario/1994/05/11/internacional/768607206_850215.html</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Desintegración a dos voces: Kravchuk y Yeltsin cuentan su versión de cómo se decidió el final de la URSS
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Pilar Bonet
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
11/05/1994
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País
Description
An account of the resource
Comparativa de perspectivas entre Kravchuk, presidente de Ucrania y Yeltsin, homólogo de Rusia sobre la caída de la URSS.
Boris Yeltsin
Fragmentación URSS
Opinión
Rusia
Ucrania
-
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Generales sobre la URSS y el mundo comunista de finales del siglo XX.
Artículo de prensa
Textos publicados en periódicos y revistas.
Texto original
<span class="foto-titulo">Reunificación agridulce </span>
<p><strong>Peter Steglich y Mercedes Álvarez</strong></p>
<p><em>Exembajador de la RDA</em></p>
<p>El derrumbe de la RDA fue para Peter Steglich al mismo tiempo “una catástrofe” y “un golpe de suerte”. Una catástrofe porque desaparecía el Estado al que él representaba como embajador, y un golpe de suerte porque le ha permitido estar con su mujer actual, la española Mercedes Álvarez. La pareja se había conocido en una conferencia en Madrid en la que ella trabajaba como intérprete. Pero Álvarez, una niña de la guerra que había pasado la infancia en la Unión Soviética, no estaba dispuesta a trasladarse de nuevo al otro lado del telón de acero. “Les decía a mis amigas que si él fuera alemán occidental podríamos estar juntos sin problemas. Pero que siendo del Este era imposible”, recuerda en el salón de su apartamento. El Muro cayó y en 1990 ya estaban viviendo juntos en el Berlín sin fronteras. Las elecciones que se celebraron en marzo de ese año ya demostraron que el régimen para el que trabajaba Steglich estaba condenado a la disolución. Con la integración en la RFA, su puesto de diplomático desapareció de la noche a la mañana y pasó a la jubilación forzosa. “Para mí fue una pena, pero con el tiempo ha quedado claro que la gente quería otra cosa. No habría tenido sentido mantener ese país artificialmente”. ¿Añora la RDA? “No. Lo que existía no lo echo de menos. Y la que yo habría deseado no era posible”.</p>
<span class="foto-firma"><span class="foto-firma"><span class="foto-autor">JULIA SOLER<br /><span class="foto-titulo">Factor de cambio </span></span></span></span>
<p><strong>Astrid Landero</strong></p>
<p><em>Experiodista y directora de un centro para mujeres</em></p>
<p>“Algo importante tiene que pasar este año”. Astrid Landero comenzó 1989 con miedo en el cuerpo. Veía que la situación era insostenible y anotó esta frase en su diario el 1 de enero. Esta periodista que entonces trabajaba para la radio de la RDA y ahora dirige un centro para mujeres confiaba en que las nuevas generaciones limpiarían el sistema. “No queríamos destruirlo, sino mejorarlo. Creíamos que la solución era una confederación entre las dos Alemanias y no una unión inmediata. No nos dábamos cuenta de que el sistema ya estaba muerto”.</p>
<p>Según como se mire, Landero podría considerarse como una de las perdedoras del cambio. Pasó de tener un trabajo fijo y poder viajar con relativa facilidad gracias a su condición de periodista a entrar de lleno en el capitalismo, con sus glorias y miserias. Desde entonces ha encadenado épocas de desempleo con trabajos improvisados de autónoma. Pero ella está contenta. “La idea de seguridad que nos vendieron en la RDA era una gran mentira. Además, la incertidumbre me hace sentir viva. A mis 60 años, acabo de hacer un curso para trabajar como guía turística. He descubierto talentos en mí que no pensaba que tuviera”, concluye.</p>
<span class="foto-firma"><span class="foto-firma"><span class="foto-autor"><span class="foto-firma"><span class="foto-autor">JULIA SOLER</span></span><br /><br /><span class="foto-titulo">Promesas del este </span></span></span></span>
<p><strong>Dagmar Enkelmann</strong></p>
<p><em>Presidenta de la Fundación Rosa Luxemburgo</em></p>
<p>En el cartel con el que se presentó a las elecciones de 1990, Dagmar Enkelmann aparecía con sus hijos pequeños. “Hoy no lo haría, pero eran los primeros comicios y no sabíamos qué debíamos hacer”, asegura esta mujer que militaba en el Partido Socialista Unificado –el que acaparó el poder durante 40 años en la RDA– y luego salió elegida diputada por su heredero, el Partido del Socialismo Democrático.</p>
<p>Pasaron casi dos meses desde la caída del Muro hasta que la hoy presidenta de la Fundación Rosa Luxemburgo se decidiera a cruzar al otro lado. “Me daba miedo de que cerraran las fronteras de repente y no me dejaran volver. Tenía claro que quería quedarme en el Este”, explica.</p>
<p>Enkelmann recuerda con emoción la multitud de discusiones y reuniones políticas en las que participó en los meses anteriores al derrumbamiento del régimen. “Sobre el papel de las mujeres, sobre la cultura… hablábamos de todo. Pero en ese momento nadie pensaba en la reunificación. No era tema de discusión. En diciembre de 1989 esto empezó a cambiar”, recuerda. Y 25 años más tarde, ¿qué opinan las nuevas generaciones? “Todo ha cambiado mucho. Cuando le hablo a mi hijo de estos temas, me dice que para él no tiene un significado especial ser del Este”.</p>
<span class="foto-firma"><span class="foto-autor"><span class="foto-firma"><span class="foto-autor">JULIA SOLER</span></span><br /><br />Más en el enlace.</span></span>
Enlace
<a href="https://elpais.com/elpais/2014/10/21/fotorrelato/1413902011_898120.html#1413902011_898120_1413902070" target="_blank">https://elpais.com/elpais/2014/10/21/fotorrelato/1413902011_898120.html#1413902011_898120_1413902070</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Diez historias berlinesas
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Julia Soler
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
21/10/2014
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País
Description
An account of the resource
Diez historias de familias que vieron cambiar sus vidas tras la caída del Muro de Berlín.
Berlín
Historias personales
Muro de Berlín
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/dc1f5358b186f0cd845ff92a130eb180.jpg
45403e08fcbf8fa0c930cd785b7c6b85
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fotografías sobre la fragmentación de la URSS y el Otoño de las Naciones.
Fotografía
Enlace
<a href="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414076622_183825_1414504418_noticia_normal.jpg" target="_blank">https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414076622_183825_1414504418_noticia_normal.jpg</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
El dramaturgo Vaclav Hável, recién elegido presidente, se dirige a los checos en una plaza de Praga.
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Petar Kujundzic
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
1993
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País / Reuters
República Checa
Václav Havel
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/0ea973fc91045009fa4d8b57d4635b2e.jpg
c99be28d921947a4ea6b73114e149044
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fotografías sobre la fragmentación de la URSS y el Otoño de las Naciones.
Fotografía
Enlace
<a href="https://internacional.elpais.com/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414077329_481458_1415214162_sumario_grande.jpg" target="_blank">https://internacional.elpais.com/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414077329_481458_1415214162_sumario_grande.jpg</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Guardias húngaros retiran la alambrada de la frontera con Austria en 1989 tras la caída del muro.
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Gino Molin
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
1989
Source
A related resource from which the described resource is derived
AP / El País
Hungría
Muro de Berlín
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/c0a72daf21daa49c64e007bfe83b2786.jpg
a1a25c2f62ef24bae6f09a3bc58e55bd
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fotografías sobre la fragmentación de la URSS y el Otoño de las Naciones.
Fotografía
Enlace
<a href="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414077329_481458_1415214247_sumario_normal.jpg" target="_blank">https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/23/actualidad/1414077329_481458_1415214247_sumario_normal.jpg</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Un McDonald's en Budapest en 1989
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Peter Turnley
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
1989
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País / Corbis
Aperturismo
Hungría
McDonald's
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/1ba7934566916c6a0d24427765561708.pdf
50485248fde37de4631e9cf7978464f0
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Sobre la situación de Bulgaria.
Artículo de prensa
Textos publicados en periódicos y revistas.
Texto original
<br /><img src="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475_1414679780_noticia_normal.jpg" alt="Unas 50.000 personas se manifestaron el 18 de noviembre de 1989 en Sofía por unas elecciones libres. " width="560" height="373" /><span class="foto-texto">Unas 50.000 personas se manifestaron el 18 de noviembre de 1989 en Sofía por unas elecciones libres. </span><span class="foto-firma"><span class="foto-autor">JOEL ROBINE</span> <span class="foto-agencia">AFP</span></span>
<div id="cuerpo_noticia" class="articulo-cuerpo">
<p>En un cuarto de siglo, Bulgaria ha pasado de ser el aliado más fiel de la Unión Soviética al farolillo rojo de la Unión Europea, así que no es de extrañar el descontento de la ciudadanía, que ya en 2009, víctima de una fatiga reformista, consideraba que bajo el comunismo se vivía mejor. Ese año, cuando a diferencia de otros vecinos del Este los búlgaros <a href="http://www.novinite.com/articles/109690/Bulgaria+Won%27t+be+Celebrating+1989">celebraron sin pena ni gloria el vigésimo aniversario de la caída del Muro</a>, el grado de aprobación de la transición de la dictadura a la democracia había caído 24 puntos, hasta un raspado 52%, desde una satisfacción inicial del 76%, <a href="http://www.google.es/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=1&cad=rja&uact=8&ved=0CCEQFjAA&url=http%3A%2F%2Fwww.pewglobal.org%2F2009%2F11%2F02%2Fend-of-communism-cheered-but-now-with-more-reservations%2F&ei=uSZKVKbpCLffsATe0oDYDQ&usg=AFQjCNHPf_2u61AM37giV1UW3A9pWbMojA&bvm=bv.77880786,d.cWc">según un informe de Pew Research</a>. La sensación de que el proceso, pacífico pero extenuante, aún no ha terminado se traduce en la larga cadena de huelgas y movilizaciones y, por ende, en la inestabilidad política que acarrea el país, en especial desde <a href="https://elpais.com/internacional/2013/02/20/actualidad/1361347352_148879.html">la caída del Gobierno conservador de Boiko Borisov en febrero de 2013</a>, a consecuencia precisamente de una oleada de protestas <a href="https://elpais.com/internacional/2013/02/21/actualidad/1361469309_244142.html">por el alto precio de la luz</a>. </p>
<div id="elpais_gpt-INTEXT" data-google-query-id="CPefk_2ImtUCFQXIUQod8toPGg">
<div id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/internacional/intext_0__container__"><iframe id="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/internacional/intext_0" title="3rd party ad content" name="google_ads_iframe_/7811748/elpais_web/internacional/intext_0" frameborder="0" marginwidth="0" marginheight="0" scrolling="no" width="1" height="1" data-integralas-id-2422396b-bf71-eb1f-32ab-9808ac1048f8=""></iframe></div>
</div>
<p>Como no podía ser de otra manera, tratándose del discípulo más aplicado del Kremlin, el dictador Todor Yivkov —líder desde 1954, decano de los dirigentes del bloque soviético— renunció al poder sólo un día después de que cayera el Muro. Pero lo hizo a regañadientes, inducido por Moscú y arrollado en la práctica por un golpe de Estado palaciego de funcionarios que, bajo distintas siglas, se las arreglaron para permanecer en el poder hasta 1997. La metamorfosis fue automática: al partido único (900.000 militantes en una población de casi nueve millones) le llevó semanas reconvertirse en el Socialista de Bulgaria (PSB) para, de la mano del también <em>reciclado</em> Petar Mladenov, nombrado presidente en abril de 1990, ganar las primeras elecciones libres dos meses después. La autosucesión comunista —similar a la de sus correligionarios rumanos tras el final abrupto de Ceaucescu— fue agrietándose con la progresiva aparición en escena de partidos de centroderecha. El GERB, liderado por <a href="https://elpais.com/internacional/2013/02/20/actualidad/1361388775_665047.html">Borisov</a>, ha resultado el más exitoso, si bien <a href="https://elpais.com/internacional/2014/10/06/actualidad/1412552648_562777.html">incapaz de lograr una mayoría suficiente en las últimas elecciones de octubre</a>.</p>
<div id="inread1" data-inread-tag="https://pubads.g.doubleclick.net/gampad/ads?sz=640x480|640x380&iu=/7811748/elpais_web/player_intext/flash&impl=s&cust_params=pbskey%3Dbloques_politicos_a%2csegunda_guerra_mundial_a%2cbalcanes_a%2ceuropa_este_a%2chistoria_contemporanea_a%2cguerra_a%2ceuropa_sur_a%2ccontaminacion_a%2cetnias_a%2chistoria_a%2cmuro_berlin_a%2cconflictos_a%2cproblemas_ambientales_a%2csociedad_a%2cmedio_ambiente_a%2ccentroeuropa_a%2ceuropa_a%2cberlin_a%2cdesaparicion_urss_a%2cunificacion_alemana_a%2cbulgaria_a%2ccontaminacion_industrial_a%2cminorias_etnicas_a%2calemania_a%2cgrupos_sociales_a%2c1414360737_822475&gdfp_req=1&env=vp&output=vast&unviewed_position_start=1&url=[referrer_url]&description_url=[description_url]&correlator=795747" data-inread-width="640" data-inread-height="360" data-inread-transition-time="1" data-inread-preload="false" data-inread-debug="false"> </div>
<p> </p>
<p>En los días de la caída del muro de Berlín, junto a tiendas desabastecidas, olores rancios, químicos; oscuridad y silencio insondables y cirios encendidos en una repentina epifanía de las iglesias, el aire en las ciudades búlgaras –con Sofía, la capital, a la cabeza- tenía la presencia amenazante de un manto de ceniza. La contaminación, principal legado de la industrialización forzosa, desempeñó un papel notorio en las pacíficas protestas que coadyuvaron al final del régimen. Porque la <em>primavera</em> búlgara, la <span class="st"><em>preustroitsvo</em> (perestroika)<em>,</em></span> tuvo su marca propia, la <em>ecoglasnost</em>, nombre de la organización que enarboló la bandera medioambiental y vehiculó el hastío social sacando a las calles de Sofía hasta a 50.000 personas en noviembre de 1989.</p>
<a name="sumario_1"></a>
<div class="sumario__interior"><a class="enlace"><img src="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475_1414679942_sumario_normal.jpg" alt="Monumento a Lenin, en Sofía, en abril de 1989." width="560" height="375" /><span class="boton_ampliar">ampliar foto</span></a><span class="foto-texto">Monumento a Lenin, en Sofía, en abril de 1989.</span> <span class="foto-firma"><span class="foto-autor">MIKE ABRAHAMS</span> <span class="foto-agencia">MIKE ABRAHAMS</span></span>
<div class="sumario-texto"> </div>
</div>
<p>Durante años, las dos plantas metalúrgicas que rodeaban la capital descargaron toneladas de partículas contaminantes sobre la ciudad; un informe del propio Partido constataba que casi el 60% de la tierra cultivable del país era ponzoñosa. Cuando los comunistas tomaron el poder, en 1944, Bulgaria era una sociedad agrícola. En 1989, el 60% de la población vivía en las ciudades. En su libro <em>La primavera del Este</em>, <a href="https://elpais.com/tag/manuel_leguineche/a/">Manu Leguineche</a> recogió el testimonio de Ana, una vecina de Sofía que sufría graves dolores de cabeza cada vez que salía al campo: “Fui al médico y me dijo que la ausencia de contaminación me afectaba; que les pasaba a muchos de los habitantes de Sofía, que les perturbaba la ausencia de contaminación, la limpieza del aire”, relata.</p>
<p>El modelo de industria pesada derivado de una economía estatista ha dejado una huella indeleble, y condicionado incluso <a href="https://elpais.com/internacional/2006/09/26/actualidad/1159221607_850215.html">el ingreso del país en la UE, en 2007</a>: Sofía tuvo que cerrar cuatro de los seis reactores de <a href="https://elpais.com/economia/2013/01/27/agencias/1359260398_179340.html">la planta nuclear</a> <a href="https://elpais.com/economia/2013/01/27/agencias/1359260398_179340.html">de Kozloduy</a>, que produce un tercio de la electricidad del país, como precio por la incorporación al club europeo.</p>
<p>Pero las manifestaciones que jalonaron el fin del régimen no fueron sólo de índole ecológica; o, como en los países del entorno, política. Muchos de los manifestantes que en el otoño de 1989 se echaron a las calles lo hicieron por derechos civiles tan básicos como la supresión del impuesto a la soltería. El régimen penalizaba a los solteros para incitarlos al matrimonio y la procreación, con objeto de contrarrestar la pujanza demográfica de la minoría turca (el 10% de la población); pero también imponía tasas por tenencia de animales domésticos, esas manifestaciones tan afectas al <em>surrealismo socialista</em>. Hasta la cera de los cirios estaba prohibida, mientras las gacetas eclesiásticas celebraban los aniversarios de Lenin y los monasterios ortodoxos eran reconvertidos en hoteles.</p>
<p>El comunismo xenófobo de Yivkov se perpetuó al grito de “turcos a Turquía”. Y el malestar de la mayor minoría étnica de los Balcanes contribuyó a su manera a la caída del régimen. En 1984, los “musulmanes búlgaros”, como eran denominados —mentar al turco era mentar la bicha, tras cinco siglos de dominación otomana—, fueron conminados a cambiar sus nombres originales por otros eslavos; se les prohibió hablar su idioma y la práctica de la circuncisión. En mayo de 1989, protagonizaron la mayor manifestación contra el régimen desde la guerra, que la policía reprimió a tiros, y en agosto, rendidos a la evidencia de un poder aún omnímodo, iniciaron un éxodo que sacó del país a más de 320.000 personas. Sin embargo, desde la caída del Muro, el <a href="https://internacional.elpais.com/internacional/2014/05/09/actualidad/1399635694_577330.html">partido de la minoría turca Movimiento por los Derechos y las Libertades</a> (DPS) es clave en la formación de Gobierno, como demuestran <a href="https://internacional.elpais.com/internacional/2014/10/06/actualidad/1412552648_562777.html">los resultados de las últimas elecciones</a>.</p>
<a name="sumario_2"></a>
<div class="sumario__interior"><a class="enlace"><img src="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475_1414680133_sumario_normal.jpg" alt="Manifestantes con fotos de Petar Mladenov, el sustituto del dictador Todor Yivkov, y el órgano del régimen, 'Rabotnichesko Delo', en la 'protesta de los 50.000' en Sofía." width="560" height="373" /><span class="boton_ampliar">ampliar foto</span></a><span class="foto-texto">Manifestantes con fotos de Petar Mladenov, el sustituto del dictador Todor Yivkov, y el órgano del régimen, 'Rabotnichesko Delo', en la 'protesta de los 50.000' en Sofía.</span> <span class="foto-firma"><span class="foto-autor">JOEL ROBINE</span> <span class="foto-agencia">AFP</span></span>
<div class="sumario-texto"> </div>
</div>
<p>Desde el ingreso de Rumanía y Bulgaria en la UE, Bruselas mira con lupa todo lo relacionado con la corrupción y el crimen organizado, dos fenómenos que, para muchos, han eclosionado con la transición. Pero no ha sido así: ya en tiempos de Yivkov la estación central de tren de Sofía era el dorado del contrabando en la Europa del Este. El <em>Istanbul Express</em> llegaba cada mañana con una nueva provisión de mercancías, de medias de seda o vaqueros a medicinas, licores o perfumes falsos. Y en el bazar de Bitaka, a ocho kilómetros de la capital, se podía comprar de todo, “de una piedra de mechero a un misil nuclear”, cuenta Leguineche en el citado libro</p>
<p>Pero ese menudeo destinado a suplir carencias o fantasías de mercado era un juego de niños en comparación con los fraudes a gran escala que se multiplicaron con la liberalización económica. La insuficiencia de las reformas para atajar la corrupción y el crimen organizado provocó una airada respuesta por parte de la UE, sobre todo tras el asesinato, en 2008, de dos conocidos capos mafiosos, uno de ellos factótum de la industria nuclear, lo que destapó un escándalo de venta de secretos de Estado a bandas criminales. De hecho, la Comisión Europea suspendió ayudas por valor de cientos de millones de euros por la ineficacia del Gobierno para sanear la vida pública y combatir el crimen.</p>
<p>Durante la etapa comunista, en fin, Bulgaria se significó entre los países de su entorno por su fidelidad al Kremlin hasta el punto de ser conocida como la 16ª República de la URSS. Buena parte de ese agradecimiento se debió a la entrada del Ejército Rojo, que en 1944 protagonizó la "segunda liberación" del país al poner fin a tres años de ocupación nazi. En 1878 los rusos habían sido responsables de la primera, al liberar a Bulgaria del yugo otomano. Ese vínculo fraterno no se vio correspondido, empero, con un protagonismo relevante en la órbita soviética, y sí con un papel modesto, incomparable, por ejemplo, con el liderazgo internacionalista de Yugoslavia o con el <em>glamour</em> de la <em>intelligentsia</em>checa.</p>
</div>
Enlace
<a href="https://internacional.elpais.com/internacional/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475.html" target="_blank">https://internacional.elpais.com/internacional/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475.html</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Bulgaria, bajo la bandera de la ‘ecoglasnost’
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
María Antonia Sánchez Vallejo
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
06/11/2014
Source
A related resource from which the described resource is derived
El País
Description
An account of the resource
Repaso por la transición a la democracia de Bulgaria.
Bulgaria
Transiciones de Europa del Este
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/2c2b22fb4c3aef9cda9b9b54e96b6478.jpg
426ca0c40a3235fcafd0583fb4d73e7d
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fotografías sobre la fragmentación de la URSS y el Otoño de las Naciones.
Fotografía
Enlace
<a href="https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475_1414679780_noticia_normal.jpg" target="_blank">https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2014/10/26/actualidad/1414360737_822475_1414679780_noticia_normal.jpg</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Unas 50.000 personas se manifestaron el 18 de noviembre de 1989 en Sofía, Bulgaria, por unas elecciones libres.
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Joel Robine
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
18/11/1989
Source
A related resource from which the described resource is derived
AFP / El País
Bulgaria
Fragmentación URSS
Manifestaciones
-
http://repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/files/original/354a63d0e4c22fc35de1a17a54fea06b.jpg
b1a771afd8b11bb478c5a9b8345c8902
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Fotografías sobre la fragmentación de la URSS y el Otoño de las Naciones.
Fotografía
Enlace
<a href="https://internacional.elpais.com/internacional/imagenes/2014/10/29/actualidad/1414600848_483172_1415149846_sumario_grande.jpg" target="_blank">https://internacional.elpais.com/internacional/imagenes/2014/10/29/actualidad/1414600848_483172_1415149846_sumario_grande.jpg</a>
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
Un coche Trabant cruza la frontera la noche del 9 de noviembre de 1989
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Sven Simon
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
09/11/1989
Source
A related resource from which the described resource is derived
Cordon Press / El País
Berlín
Muro de Berlín
Reunificación alemana